En esta dieta se nos puede presentar la monotonía y empezar a pensar que comemos siempre lo mismo.
Existen una cantidad limitada de distintos tipos de frutas y verduras disponibles en nuestra localidad o establecimiento más cercano.
El abanico de posibilidades de los alimentos industriales es más amplio y nos puede llevar a pensar que la dieta usual es más variada y sana.
Nada más lejos de la realidad. Somos afortunados de vivir en un país en que las fruterías están en cada barrio. Con productos frescos de temporada. Tenemos que saber adaptar nuestra dieta a las frutas y verduras de temporada y así vamos rotando los alimentos.
Podemos encontrar siempre en nuestro supermercado carne fileteada, pescado congelado y pescado fresco que nos dan un gran abanico de posibilidades.
Tenemos ser conscientes de que debemos probar cosas nuevas.
Los calamares congelados me gustarán? Que tal quedará el bacalao con un guiso de verduras?
Me gustarán los corazones de pollo?
Pruébalo!! Siempre que sean frutas, verduras, carne y pescado no tienes nada que temer.
Saludos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario